Hola chic@s, que tal estamos?
Como os comenté en el anterior post, hoy hablaremos sobre los preprados con plantas.
Como hemos comentado con anterioridad, cada planta requiere un preparado específico en función del beneficio terapéutico que se persiga.
El objetico principal es potenciar aún más el efecto curativo que ya de por si tiene la planta. Para ello se mezclan las partes activas de la hierba con diferentes bases y de esas mezclas, se obtienen 3 tipos de remedios. Vamos a ello.
- A base de aceites: Favorecen que ciertos principos activos penetren de forma más rápida a través de la piel, potenciando de este modo su acción. Son muy adecuados para afecciones dermatológicas o musculares, aunque también pueden servir para dolores de cabeza y migrañas. Por ejemplo: las pomadas
- A base de agua: El agua es la principal fuente de la vida y compone el 60% de nuestro cuerpo, por ello, resulta un potenciador ideal para numerosos principios activos de las plantas. El agua no solo sirve de base para remedios internos, que deban ingerirse o inhalarse (infusiones, vahos) también fundamenta preparados externos que se aplican por via tópica, como los vaños o cataplasmas.
- A base de alcohól: La elaboración de remedios sobre una base de alcohól (tinturas) nos permite mantenerlos mucho más tiempo. El alcohól en contacto con las hierbas, extrae sus componentes activos, por lo que suelen ser mucho más concentrados. Los tratamientos suelen componerse de una par de gotas diluidas en agua 2-3 veces al dia.
